Las lluvias han alimentado notablemente los cauces de los ríos en el norte argentino, por lo que en el dique El Cadillal de la vecina provincia de Tucumán han tenido que abrir las compuertas para aliviar la presión permitida sobre la cota. El organismo que regula la seguridad de las presas, recomendó que el nivel del embalse no supere los 604 msnm para mantener firme la prensa 3, donde las obras no han terminado luego de detectar fisuras en la estructura en diciembre de 2022. «Si las obras de El Cadillal estuviesen terminadas la cota podría tener un nivel más alto y todo esto se podría haber evitado», confió una fuente de Obras Pública tucumana. En tanto en Santiago del Estero ingresan 550 métros cúbicos de agua por segundo, provocando una importante crecida del caudal. Autoridades del cuerpo de Guardavidas remarcaron que como medida preventiva se prohibió el ingreso de toda persona al río. La fuerza del importante caudal que ingresa provoca movimientos en la arena del río, representando un peligro latente para quienes ingresen.